lunes, 29 de octubre de 2012


Siempre la claridad viene del cielo
Como la piel de un fruto, suave
Es labranza del aire
Y el recuerdo de aquellos días permanece
Como todo en la vida, durante algún tiempo.
¡Mover el corazón todos los días
casi cien veces por minuto!
Y saber sentir
Como una nube en la luz.
Qué trasparencia ahí dentro
En tu historia, en tus versos.
No diré lo que sentí
Que me quedé no sabiendo
La primera vez que los leí
Sobre la porcelana de la tarde.
Haz lo que te pida el alma - me dijiste
Y hoy me pide salir, gritar, vivir
Pasear por las calles de Madrid, 
Entrar, subir las escaleras y verte en ese estante
Y ver que las manos del mundo pueden acariciar
Nuevas páginas, nuevos versos.
En las pálidas tardes yerran nubes tranquilas en el azul
Y no dan sombra:
Son tus poemas los que devoran
El jardín extranjero. 


sábado, 27 de octubre de 2012


El fuego con un inmenso infinito en llamas
envolvía  un delirio desconocido, unas rocas entre sombras
unas manos que abrazaban la tinta de sus versos.
Así soñé que se alejaba
y nunca me atreví a pensar su rostro.

miércoles, 24 de octubre de 2012

Día de William Blake



TIGER, tiger, burning bright 
In the forests of the night, 
What immortal hand or eye 
Could frame thy fearful symmetry? 

martes, 23 de octubre de 2012

Tristes Trópicos

"Entonces comprendo la pasión, la locura, el engaño de los relatos de viaje. Traen la ilusión de lo que ya no existe y que debería existir aún para que pudiéramos escapar a la agobiadora evidencia de que han sido jugados veinte mil años de historia. Ya no hay nada que hacer: la civilización no es más que esa flor frágil, que preservábamos, que hacíamos crecer, con gran cuidado, en algunos rincones abrigados, de un terruño rico en especies rústicas, sin duda amenazadoras por su lozanía, pero que permitían variar y vigorizar el plantel. La humanidad se instala en el monocultivo; se dispone a producir la civilización en masa, como la remolacha. Su comida diaria sólo se compondrá de este plato”. (Tristes Trópicos, C. L. Strauss).

sábado, 20 de octubre de 2012


Su mirada 
se bañaba en la película del recuerdo.
Era una tarde de cielo con alhajas de plata 
y las perlas de sus ojos cubrían las calles.
Es el momento, susurraste, 
de que mis latidos dejen de pertenecerme
para ser alimento de otra vida
de otra inocencia que ansíe 
besar el hielo de este mundo.
Y con su mano arrugando la lluvia me dijo adiós.
Marchaste 
hacia el recodo que te anhelaba,
que jamás te devolverá a mi mañana
y ahora que me haces falta
no sé cuál de todas ellas eres
no sé cuál es tu luz
y aquella niña llora por abrazarte
por encontrarte
estrella del tiempo.


Huelen a aquella tarde las páginas del poeta.
Entre grafías llega 
la incandescencia del cielo
el perfume a tierra mojada
la sequedad de unos labios que pensaron
aliviar su sed en mi mano.
Señor no soy una fuente mas que de palabras
y si por mis venas fluye algo que sea el negro que las compone.
Caballero no soy una dama
mas aparentando amar esa cumbre que roza el cielo
prefiero beber el marrón de mi techo.
Niña deja de pensar mis latidos
deja de soñar el viento
no tortures mi alma con el barro
y huele estas páginas
saben a nosotros
saben a poesía.


viernes, 19 de octubre de 2012


Estoy en compañía del tiempo 
frecuentando como antes la soledad.
Observo y es la luz en ti mi estro
a pesar de caer la ira en la noche
y abrazar por el olvido
las páginas de un recuerdo.
Observo y alcanzo a ver tu desconcierto
allá
mucho más lejos del océano y me pregunto
qué habrá sido del decir de los gusanos.





                                                   A Mireya
Siento tu luz abrazar la lluvia
Y tu inocencia ya perdida.
Escucho tus pupilas contar 
cada estrella de ese techo
y siento con suavidad la dulce corriente 
que emana del batir de tus alas.
Te siento ya en otra orilla
y tus pasos 
en el contoneo de otros dados.
Y no es el ansia ni el azar,
es la belleza
de las nanas ya dormidas
de un encuentro con tus sueños
y de esas manos que olvidaron
el ábaco que te enseñó a sumar.

martes, 16 de octubre de 2012

Abre tu luz
y muéstrame el canto de las amapolas.
Entonan
el himno que me lleva hacia tu rostro
hacia el recuerdo de aquel paisaje
vestido con sutiles galas de encaje.
Muéstrame los poemas ya olvidados
y el grifo que trataba
de nosotros al fin borrarlos.
Pero es tu luz en esta noche
Eres tú
Abriéndome las puertas hacia otra libertad.

miércoles, 10 de octubre de 2012

Si mis suspiros fueran palabras
y
este corazón comprendiese el dolor,
mis latidos serían ráfagas de viento
que te ofrecerían cada noche un verso de amor.

viernes, 28 de septiembre de 2012


Entre palabras se ahogó mi amor
como una fuente cubre los sueños
de quienes deparan su suerte
en azar del agua
de monedas ya obsoletas
de grilletes ya sellados.
Y entre palabras te dije adiós
Como quien respira al son el viento
Como quien cierra el firmamento
y despide la luz del cielo
con un sutil beso
hacia qué estrella que lo ornamente
hacia qué caricia volátil ya
inexistente.
"Querida Lou, heme aquí al término de un largo, ancho y duro período, con el que caduca cierto futuro que no había sido fuerte y religiosamente alimentado, sino torturado hasta el aniquilamiento (algo en lo que, poco más o menos, soy inimitable). Si a veces, durante estos últimos años, había podido disculparme so pretexto de que algunos intentos por asentarme más humana y naturalmente en la vida fracasaron porque las personas concernidas no me habían comprendido,  me hacían sufrir ininterrumpidamente violencias, injusticias y prejuicios, precipitándome así en tan gran desasosiego, resulta ahora que después de meses de sufrimiento me encuentro orientado de muy diferente manera: teniendo que reconocer que, esta vez, nadie puede ayudarme. Y aunque alguien viniera con su alma más inocente, más inmediata, y encontrara su referencia en los mismos astros, aunque me soportara a pesar de mi torpeza y rigidez y conservara su pura e infalible disposición para conmigo; aun cuando el rayo de su amor viniera a estrellarse diez veces en la turbia y densa superficie de mi universo submarino, todavía sería yo capaz (lo sé ahora) de empobrecerlo en el seno de la abundancia de su ayuda renovada sin cesar, de encerrarlo en el irrespirable dominio de una ausencia total de ternura, hasta el punto en que, vuelto inaplicable su auxilio, pasara él mismo de la plenitud a la marchitez, hasta dar en una siniestra decadencia."
Rainer Maria Rilke a Lou Andréas-Salomé


[...] “¿Y esas serán mis rosas? Y ¿acaso no es esto un jardín que florece para ti, alma incomprensible? ¿Acaso hay alguna que no hayas hecho crecer tú con el sol de tu corazón? “[...]
(Pág. 237, Rainer Maria Rilke a Benvenuta. 1913-1914)

jueves, 27 de septiembre de 2012

Feliz cumpleaños mi veinteañeraaa!!

¡FELICIDADEEEEES!

Querida babe:

Juntas hemos vivido miles de experiencias, de risas, de lágrimas, de agobios…..
Tú has sido quien me ha ayudado en mis peores momentos y quien me ha hecho ver la luz del sol entre el gris con el que teñían el cielo las nubes.
Me has ayudado a saborear todo lo bueno que me aportaba la vida y gracias a ti he podido viajar por mundos inexplorables.
Juntas hemos soñado un futuro en el que el mundo dejaba de girar, en el que las manecillas de los relojes frenaban su vals para que pudiésemos vivir con más fuerza que nunca cada día…. Y créeme que ese mañana está por llegar. 
No habrá recodo en el mapa que no hayamos visitado, no habrá checos que se nos resistan ni parisinos que no se rindan a nuestros pieees!! jajaja
Y es que la distancia querida amiga, no es suficiente para olvidarme de lo mucho que te quiero y de todos los planes que tenemos juntas.
Te loveo!


Hoy la oscuridad del cielo me acompaña en mi viaje, esta vez hora y veinte minutos hasta mi futuro. La lluvia tiñe las aceras y los sueños de quienes duermen se sienten por cada casa que observo desde la ventana. Aquí los pasajeros también han decidido que aun no es hora de lidiar con la realidad.
La mayoría duerme; reposan sus párpados
y sus pensamientos,
viajan en otro vagón lejos de todo lo circundante.

viernes, 21 de septiembre de 2012


Abre la noche su historia
en la orilla que nos hablaba.
Como una brisa y su ceguera
inocente nadaste hacia la luna
entre el vapor de sus aguas.
Te supe llorando
en la oscuridad que lo absorbe todo:
tu vida
y la mía.
Y al besar tu mirada sólo vi
que ese charco no fue un mar
y que ese rayo fue la luz
que robó tus pasos y me alejó de verte
de sonreírte y de soñarte
De tenerte.
Sólo queda una oración
y su eco.

miércoles, 5 de septiembre de 2012


En ocasiones tenemos la necesidad de contar todo aquello que nos sucede o de dejar reflejado en un papel todas aquellas palabras que vuelan por nuestra cabeza y zarpan sin destino certero. 
Algunas quedan en un terrible y profundo olvido, mientras  que otras luchan con fuerza por persistir y salir de dentro, como un grito gutural.
No todo ha de tener relación con nosotros. Siempre podemos hablar de todo aquello que nos rodea, de esa realidad circundante que nos atrapa.
Hace poco resurgió de mí una idea que había quedado oculta y que resonaba con más fuerza que nunca: tus sentimientos no requieren de una previa reflexión o lectura, no tienes por qué conocer el mundo para vivirlo; sólo has de cerrar los ojos y percibirlo, escuchar los secretos que los rayos de sol te fían.
Y aun así todo se presenta ante mí de forma inefable.
No todos poseemos esa habilidad de hallar el lenguaje exacto con el que traducir lo que vivimos de tal forma que sea inteligible para aquellos que se obcecan en comprender todo lo que leen, ignorando la existencia de lo incomprensible, muchas veces más bello que todo lo convencional.
Y es que lo que se presenta ante nosotros con sus galas misteriosas e indescifrables se muestra más atractivo y majestuoso para el alma.
Quizás sea por esta duda de no entender lo que me rodea que este sentimiento se acontece más fascinante, aunque no sé si el dolor puede adoptar una máscara para exhibirse ante mí bello.

martes, 4 de septiembre de 2012

Rompiste con tantas convenciones y hallaste tal perfección en tus versos que todo lo que escribí después fue como retratar un basto paisaje. La tierra a la que vine, este vals lírico, "ya no tenía primavera".

martes, 28 de agosto de 2012

Villanueva de los Infantes - Pasanteo everywhere

Villanueva de los Infantes está situada al este de la provincia de Ciudad Real. En 1350 pasó a ser aldea de Montiel, hecha villa independiente por el Infante D. Enrique de Aragón y sus hermanos, quienes le otorgaron la Carta Puebla en 1421. En gratitud a ellos la villa tomó el nombre de "Infantes" en 1480 y en 1491 se le dio el de "Villanueva". 
En 1573 se convirtió en Capital del Campo de Montiel, por orden de Felipe II. 
En 1895 obtuvo el título de ciudad y en 1974 fue declarada Conjunto Histórico-Artístico.
Desde el 11 de diciembre de 2004, Villanueva de los Infantes es "El lugar de la Mancha" a raíz del estudio científico, sacado a la luz por el equipo multidisciplinar de investigación de la Universidad Complutense de Madrid.
El plato más típico y autóctono de la localidad es la "ensalá de limón", que se realiza con zumo y pulpa de limón, cebolla, aceite, pimentón y manzana o naranja.










"Halló don Quijote ser la casa de don Diego de Miranda ancha como de aldea; las armas, empero, aunque de piedra tosca, encima de la puerta de la calle; la bodega, en el patio; la cueva, en el portal, y muchas tinajas a la redonda, que, por ser del Toboso, le renovaron las memorias de su encantada y transformada Dulcinea..."


´
Con Antonio Gómez Rufo, "Llegar a ese punto de la arenaestar finalmente allí como una difusa silueta recortada por el doloroso resplandor de los azules..." Un gato en el desván

















miércoles, 22 de agosto de 2012





A partir de cierto punto no hay retorno. Ese es el punto que hay que alcanzar.
"En general – escribió Kafka en 1904 a su amigo Oskar Pollak -, creo que sólo debemos leer libros que nos muerdan y nos arañen. Si el libro que estamos leyendo no nos obliga a despertarnos como un mazazo en el cráneo, ¿para qué molestarnos en leerlo? Lo que necesitamos son libros que nos golpeen como una desgracia dolorosa, como la muerte de alguien a quien queríamos más que a nosotros mismos, libros que nos hagan sentirnos desterrados a las junglas más remotas, lejos de toda presencia humana, algo semejante al suicidio. Un libro debe ser el hacha que quiebre el mar helado dentro de nosotros. Eso es lo que creo

martes, 21 de agosto de 2012

Hilando - Claudio Rodríguez


Tanta serenidad es ya dolor.
Junto a la luz del aire
la camisa ya es música, y está recién lavada,
aclarada,
bien ceñida al escorzo
risueño y torneado de la espalda,
con su feraz cosecha,
con el amanecer nunca tardío
de la ropa y la obra. Este es el campo
del milagro: helo aquí,
en el alba del brazo,
en el destello de estas manos, tan acariciadoras
devanando la lana:
el hilo y el ovillo,
y la nuca sin miedo, cantando su viveza,
y el pelo muy castaño
tan bien trenzado,
con su moño y su cinta;
y la falda segura; sin pliegues, color jugo de acacia.

Con la velocidad del cielo ido,
con el taller, con
el ritmo de las mareas de las calles,
está aquí, sin mentira,
con un amor tan mudo y con retorno,
con su celebración y con su servidumbre.



martes, 14 de agosto de 2012

El hedor de la falacia lo consume el viento
como el mar la voz del silencio
y su eco
resonó entre el perdón de los inocentes.